Emprender Hoy da Miedo y Espanto. Que no Te Engañen. Aún Así, Hay Oportunidades y Soluciones

Emprender hoy da miedo a la gran mayoría de las personas. Siempre ha sido así y es una reacción lógica ante lo nuevo, lo impredecible, las variables que no puedes controlar, los obstáculos y la frustración inevitable que sabemos nos esperan en el camino.
Emprender en los Tiempos Que Corren
Emprender hoy da miedo. Siempre lo ha dado, pero en los tiempos que corren ya da espanto, pavor y pánico.
La inestabilidad de los mercados y las economías locales, la inflación galopante acompañada de una bochornosa “shrinkflation” (reducción casi imperceptible, pero progresiva del tamaño de las porciones, aun cuando aumentan el precio), la cada vez más insaciable avaricia de las grandes corporaciones, la corrupción administrativa y la incapacidad de los políticos de todas las denominaciones de origen para encontrar soluciones hacen que el “terror” sea ya un elemento imprescindible del Plan de Negocios.
La Manipulación de los Emprendedores Noveles
Es una verdad fea. Muy fea.
Pero hay que decirla con todas las letras y adjetivos. Y hay que prevenir a los emprendedores noveles.
A esos que han sido bombardeados por décadas con eslóganes bonitos y frases alentadoras de motivadores profesionales (los serios) y motivadores oportunistas, que comercian y sacan jugosos beneficios de las necesidades y aspiraciones de quienes pretenden salir adelante.
Frases como:
* “El mejor momento para emprender fue ayer. El segundo mejor momento es ahora“.
* “La clave del éxito es empezar antes de estar listo“.
* “Si no trabajas duro hoy para hacer realidad tus sueños, otro te hará trabajar aún más duro para que hagas realidad los suyos“.
* “No esperes a que las oportunidades vengan, sal y créalas“.
* “Despide a tu jefe: hora de emprender por ti mismo“.
Y un ejército más de frases que suenan bien, que tienen una cierta dosis de verdad, al mismo tiempo que muestran o bien estar muy alejadas de la realidad o bien que esconden el interés implícito de venderte mi curso, mi libro o mi “brillante” consultoría para que “puedas lograr tus objetivos” y pases al tercer y cuarto cuadrante de un Kiyosaki que nunca tuvo un padre pobre, pero sí un llamado padre rico con cuestionables métodos e iniciativas.
Por esto y mucho más siempre he afirmado que Gurulandia es una tierra muy peligrosa.
No se trata de desanimar a los que quieren emprender. Por el contrario, se trata de motivarlos con la verdad, de inspirarlos con soluciones que puedan ser aplicadas a sus presupuestos y posibilidades.
Y de que sepan a lo que se tienen que enfrentar. Se trata de que estén bien enterados de:
* Que los emprendedores siempre han enfrentado obstáculos y dificultades, pero las de hoy son mucho más grandes, aunque también hay herramientas que podemos usar hoy que antes no teníamos.
* Que las grandes redes sociales han hecho casi desaparecer el “tráfico orgánico” y que si quieren visitantes (sobre todo “visitantes calificados“) a su sitio web, van a tener que pagar. Y mucho, pues por un lado compiten con los abultados presupuestos de las grandes marcas, y por el otro se enfrentan a plataformas digitales que sólo se consideran exitosas cuando te han exprimido hasta el último centavo.
* Que las optimizaciones SEO ya casi no funcionan por “largas que sean las colas” de tus palabras clave y que la mayoría de los antes muy populares “nichos de mercado” han sido también monopolizados por quienes vieron un “tope” en sus estrategias hacia mercados masivos.
* Y que las campañas de publicidad en Facebook y Google Ads te ofrecen resultados cada vez más limitados, que ahora tienen que competir con los modelos de IA, de la cual nos dan una probadita, mientras el gran beneficio, el 80% del beneficio, va a los gloriosos “masters del Universo“.
* Que esa misma Inteligencia Artificial es “el gran robo del siglo XXI” (imparable además, ya que no se pueden negar los avances de la ciencia y la tecnología).
Cada vez que hacemos una solicitud, o le lanzamos una cadena de los archirrebuscados “prompts” que amablemente nos “obsequian” para nuestro uso y disfrute, esos modelos aprenden aceleradamente a usar nuestros conocimientos, e incluso nuestra lógica y creatividad, no sólo para sustituir más y más empleados, sino para borrar de la faz de la tierra los pequeños negocios. O al menos, reducirlos a la insignificancia.
…Y así podría seguir por horas, describiendo esa fea realidad, pero creo que como ejemplo basta. Ahora hablemos de posibles soluciones.
Soluciones Para Emprender Hoy de Manera Exitosa
Soluciones que, por supuesto, yo no tengo. Y tampoco creo que nadie las tenga o ya habría ganado 7 Premios Nobel a la vez.
Pero soluciones de las que hay que comenzar a hablar, a debatir con franqueza y de manera descarnada, sin fracesitas prefabricadas que ganan adeptos y “likes“, pero nos siguen dejando sin respuestas.
Yo personalmente creo que la solución no está en el “perfeccionamiento” de los sistemas sociales existentes.
El Capitalismo: ni Libre Mercado ni Libre Competencia
El capitalismo que una vez se vendió como el gran impulso a las fuerzas productivas ha retrocedido a un neofeudalismo oligárquico monopolista, donde cada vez hay menos “libre mercado“, menos “libre competencia” y la cacareada “igualdad de oportunidades” suena a broma mala de circo barato.
Y todos los políticos que conozco, sean liberales o conservadores, demócratas o republicanos o el nombre que quieran adoptar según tu país o el mío, juegan a ver quién orina más lejos, mientras mantienen entre todos el “status quo” que les garantiza información privilegiada para saber qué acciones comprar en la bolsa, buenos sueldos y prestaciones, y una tribuna desde la cual servir a los poderosos que financian sus campañas.
El Socialismo: el Paraíso de las Élites
Por otro lado, el socialismo que se vendió como la alternativa popular a la degradación capitalista, en prácticamente todos lados ha caído en castas elitistas donde los hijos, las esposas, las amantes y los compadres de generales, ministros y líderes históricos son los únicos que disfrutan los privilegios de la “propiedad social sobre los medios de producción“, mientras el pueblo se debate entre carencias materiales y aún más carencias de libertades individuales.
Aunque han logrado algunas conquistas sociales, el populismo desmesurado, el caciquismo y el liderazgo estalinista han hecho florecer la corrupción, el nepotismo, el compadrismo y, lo que es aún peor, la ineficiencia productiva creciente.
Entonces, yo sólo alcanzo a ver (y ustedes tendrán cientos de otras ideas, porque yo no pretendo que las mías sean ni las únicas ni las más acertadas) dos soluciones para emprender hoy con más posibilidades de éxito: una a largo plazo y otra a corto plazo.
Socialnetismo: la Solución a Largo Plazo
La de largo plazo es lo que llamamos “socialnetismo“: la sustitución paulatina y progresiva de los regímenes sociales existentes actualmente por el poder de las redes, organizadas por profesiones, intereses geográficos particulares unidos a intereses humanos universales, etc.
Pero redes gobernadas por la gente, no por las grandes plataformas que nos han impuesto una dictadura adicional a la del capital y a la mal llamada dictadura del proletariado: la “dictadura de los algoritmos“.
Por supuesto que esa solución no es realmente para emprender hoy, pues demorará siglos, quizás más. A muchos incluso, les parecerá idílica e irrealizable, aunque a mí me parezca necesaria y factible.
No importa lo que demore, el “día cero” ya tuvo lugar y la gente va “despertando” (por mucho que quieran convertir ese término en una mala palabra), y no falta mucho para que entienda el enorme poder que tienen las redes bien organizadas, autodirigidas y gestionadas con las herramientas tecnológicas que no han podido evitar poner a nuestro alcance.
La Colaboración: la Solución a Corto Plazo
Y la solución a corto plazo es la unión de los pequeños emprendedores en ciertos tipos de cooperativas digitales (donde no pierdan individualidad, pero compartan recursos y oportunidades) y en diversas formas de asociación. Basta ya de hacerles creer a los “de abajo” que tener un negocio propio es tener un negocio “individual“.
La gran propiedad corporativa es, por esencia, una “propiedad colectiva“. Los ricos se unen para formar un banco, una gran corporación, una enorme plaza comercial, etc., porque saben que, aun con sus inmensas reservas, para triunfar deben unir recursos, experiencias, esfuerzos y relaciones.
Mientras, a nosotros nos venden el idílico sueño de tener “mi panadería, mi taller de autos, mi lavandería… mi, mío, mía, solo de mí…” y toda esa porquería que hace mucho más fácil controlarnos y que nos hace mucho más difícil poder competir.
Unirse: la única forma de competir con los tiburones del mercado
Esa, en lo que los grandes sabios aporten otras, es una solución factible, práctica y al alcance de todos para emprender hoy, con un simple cambio de mentalidad.
A esa colaboración entre los pequeños emprendedores, a la oportunidad real de unir experiencias y recursos para enfrentar a los tiburones de mercado, es que se dirige la incipiente red social que tengo el privilegio de dirigir.
En WebLat también hay frases prefabricadas, pero no es un llamado a agregar más frases bonitas, sino a “rebelearnos constructiva y positivamente” contra el status quo que nos está aplastando.
A Manera de Conclusiones
Un tema tan peliagudo y controvertido como las dificultades y oportunidades para emprender hoy no se puede abordar en un solo artículo. A este seguirán otros donde intentaré abundar en cada uno de los tópicos principales que aquí he tenido que exponer superficialmente.
No te pediré que “me sigas“, pues eso abunda tanto en las redes que ya se me hace de mal gusto, pero si te interesa participar de este debate, de manera constructiva y positiva, por favor, encuentra la manera de mantenerte al tanto. Y aporta tus ideas, que de seguro serán bienvenidas.
De lo contrario, te agradezco haber dedicado tu tiempo para llegar hasta aquí. Yo sé que este tipo de temas no mueve aplausos ni corazones, pero si te hizo reflexionar, así sea para contradecir todo lo que he expuesto, yo habré cumplido mi cometido. Gracias.
Doc, me fascinó el artículo. Brillante. Yo no sé escribir así como para agregar cosas, pero apoyo cada una de las palabras y expresiones. Gracias por compartirnos cosas con tanta fuerza y sabiduria.
Como bien dice Tania, un artículo brillante.
El artículo es impactante. No sé cómo logras resumir tanto en tan poco espacio. Tienes toda la razón: las frases bonitas pintan una realidad rosa que no existe. Hay que motivar con la verdad, que la gente sepa a lo que se va a enfrentar y que esté consciente de que los que actúan solos pocas veces triunfan porque el sistema está “diseñado” para favorecer al 1 y 9% y fastidiarnos a los demás. Sólo si nos unimos podemos cambiar esa realidad.