La principal razón de los latinos al irse a vivir a Estados Unidos es tener acceso a mejores oportunidades y mayor calidad de vida, para lo cual es casi imprescindible lograr un trabajo. Sea el de tus “sueños” o el de tus “desvelos“, pero un trabajo.
Con las actuales tasas de desempleo, los avances de la IA y la situación actual de la economía norteamericana, resulta bien difícil conseguir ese trabajo, salvo que pertenezcas a la preciada élite de profesionales altamente calificados en ciertas especialidades muy bien pagadas y donde existe carencia de especialistas: algunas ramas de la ciencia de la computación y la química de los polímeros, por mencionar solo dos.
Por otra parte, la tasa de desempleo actual en Estados Unidos es relativamente alta (ese 4% que parece insignificante se refiere a casi 7 millones de desempleados) y el desempleo puede durar hasta 5 meses como promedio, lo cual significa que tendrás que competir en el mercado de trabajo con muchos otros que, como tú, buscan una alternativa viable para alcanzar el “sueño americano”.
Vanguard predice que la tasa de desempleo aumentará levemente hasta alrededor del 4.5% en 2025. Sin embargo, si las restricciones de la oferta laboral aumentan, el desempleo puede disminuir. Claro, serán trabajos peor pagados, del tipo que “nadie quiere hacer”.
Esto significa que, si quieres venir a Estados Unidos en el 2025, o ya te encuentras en este país, pero aún no tienes una situación económica estable, tendrás que enfrentar una situación de empleo nada favorable y con tendencia a agravarse.
Además, el principal obstáculo sigue siendo el acceso a un visado legal y en regla para poder trabajar, mismo que con la nueva administración resulta más difícil de obtener. En el 2025 todo está cambiando. Las decenas de miles de empleados del gobierno federal que han echado a la calle, engrosarán las filas de desempleo, mientras que los avances en los sensores, la robótica y la inteligencia artificial seguirán sustituyendo inexorablemente muchos trabajos que hasta ahora hacíamos los humanos.
| Cada vez se ponen más limitantes para el llamado “trabajo por la izquierda”, por lo que los patrones lo pensarán dos veces antes de darte un trabajo si no tienes un Número de Seguro Social (SSN) que expresamente indique que es “Válido para trabajar”, acompañado del correspondiente permiso de trabajo (por el que, si tienes la suerte de que te lo concedan, tendrás que pagar entre $460 y $780). |
Ser extranjero puede ser además una desventaja en algunas industrias y empresas. Si tu nivel de inglés no es el adecuado para trabajar, tus posibilidades de empleo son muy limitadas y te las verás más duras que un samurái en la guerra de las Galaxias. Es por ello que muchos latinos, incluso algunos con diplomas técnicos y universitarios de sus países, tienen que emplearse en labores agrícolas, el sector constructivo o en el mundo de los servicios, como dependientes de restaurantes o gasolineras.
Esto último, por cierto, es un empleo muy interesante, pues brinda la posibilidad de conocer a muchas personas relacionadas con nuestra profesión. Por ejemplo, si trabajabas como arquitecto en tu país, no se vería mal que, con tacto y en el momento adecuado, se lo comentaras a un asiduo cliente del restaurante que tiene una empresa de construcción… o si trabajaste en una peluquería o estética, pues qué mejor que hacerle el comentario a la señora del “Hair Cuts” (local para cortes de cabello) de la esquina que viene a menudo por su cafecito. Quizás ellos puedan ayudarte.
| Página Anterior | Página Siguiente |
OPINIONES / COMENTARIOS