En buena parte de Latinoamérica también nos enfrentamos a esta desgracia, pero no a los niveles que se alcanzan en Estados Unidos, donde un alto porcentaje de los jóvenes acepta haber consumido regularmente o al menos haber probado ocasionalmente drogas durante su etapa de preuniversitario o en la Universidad.
Si bien varios de nuestros países están considerados como “los grandes productores”, nadie negará que Estados Unidos es el “Gran Consumidor” por excelencia. Esta “industria” amasa y mueve inmensas fortunas, mientras que “compra el alma” y muchas veces se cobra la vida de cientos de miles de personas.
Por ello y, sobre todo, sé extremadamente cuidadoso con tus hijos. No pienses que por el simple hecho de que tú nunca las hayas consumido y les digas a tus hijos que son malas, ya es suficiente para que no caigan en la tentación primero y en la adicción después.
Lo que se requiere es más complejo que eso; es desarrollar toda una cultura que relacione el consumo de drogas con “ser un perdedor”, algo que nadie quiere ser. Y lograr que ellos confíen en ti, que, si en algún momento se vieron tentados, sean capaces de comunicarse a tiempo con sus padres y familiares cercanos para que puedan ser ayudados. Háblales a tus hijos del tema, sin inhibiciones y con toda la responsabilidad que esto implica. Si tú no lo haces, otros lo harán (generalmente quienes lucran de la droga), pero en un tono y con un propósito diferente. |
En https://www.usa.gov/es/ayuda-abuso-alcohol-drogas puedes encontrar información muy interesante que te permitirá comprender mejor esta problemática y ayudar a tus hijos. Entre los temas que tratan están:
- El alcance del problema.
- ¿Qué pueden hacer los padres para ayudar a sus hijos?
- Tipos de drogas y sus efectos.
- ¿Qué hacer si piensas que tu hijo (a) está usando drogas?
- ¿Qué hacer si un amigo está usando drogas?
- El abuso del alcohol y las drogas en las universidades
- Prevención de violencia, y mucho más.
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