Estás buscando empleo en los Estados Unidos. Necesitas el empleo para poder vivir, para lograr avanzar en la vida, y te lo tomas muy en serio, por supuesto. Eso significa que no puede ocurrírsete que, mientras te esfuerzas extraordinariamente por lograr ese empleo, haya personas sin un ápice de decencia y sentido de humanidad, haciendo todo lo que esté a su alcance para engañarte y lucrar a costa de tu necesidad.
Desafortunadamente, esa es una realidad que tendrás que enfrentar durante tu proceso de búsqueda de trabajo. Algunas formas son muy vulgares y relativamente fáciles de detectar. Otras son una obra maestra de engaño y habilidad para utilizar información verdadera mezclada con las peores intenciones.
Veamos las variantes más conocidas de esta oscura tendencia:
Trabaja Desde tu Casa.
Haz una búsqueda en Google y verás cuántos trabajos de este tipo te ofrecen. Como rasgo común, casi todos le prometen que va a tener tiempo libre para estar con su familia y que trabajando muy poco (máximo 10 horas a la semana) desde la comodidad de su casa (sin tener que invertir tiempo y dinero en gasolina) va a ganar entre US$1,500 y US$5,000 al mes. Incluso los hay más atrevidos y prometen ingresos astronómicos que harían palidecer al propio Bill Gates.
No negamos que existen algunas formas viables y bien remuneradas de trabajo desde casa (de hecho, las hay, sobre todo después del Covid), pero debes ser extremadamente cuidadoso con los cantos de sirena… y con las nuevas modalidades que este fenómeno va adquiriendo.
Resulta que ahora existen sitios en Internet dedicados a “descubrirte” las estafas que hacen algunos que te ofrecen trabajar desde tu casa, y luego te ofrecen aquellas oportunidades que ellos “han estudiado a fondo y saben que sí funcionan”. Finalmente, son tan estafadores como los otros, solo con un método diferente y más sofisticado.
Dentro de las ofertas más comunes se encuentran las de “procesar rebajas”, con cada una de las cuales se puede ganar $15 dólares, así que, si haces 10 o 15 en un día, pues ya garantizaste el sueldo de un ejecutivo de la Gerencia Media. Muchas empresas pagan realmente por esto, pero a equipos especializados, no a alguien que, como tú, va a estar en su casa esperando ver el milagro de los peces. Algunas de estas empresas, cuando logran convencerte de entrar con ellas (para lo cual te van a pedir sumas entre US$75 y US$200), lo que harán será capacitarte para que vendas sus productos con una determinada “rebaja”, con lo cual ya pueden presumir de que no te mintieron cuando te hicieron pagar por descubrir los “secretos de procesar rebajas”.
También suelen ofrecer la de “preparar sobres” y armar paquetes promocionales que las marcas reconocidas envían a sus prospectos potenciales. La gran estafa comienza cuando te hablan de las magníficas oportunidades que se abren delante de ti, pero no te especifican bien el qué ni el cómo. Para ellos, tú tendrás que pagar por acceder a un sitio web, o recibir un CD o un libro que te revelará los prometedores secretos.
| En ocasiones llegan hasta a decirte que recibirás gratis todo el material de capacitación y luego (al final, por supuesto), te enteras de que pagarás “solamente” por el envío, el cual ya lleva integrado el costo que supuestamente te hicieron creer iba a ser igual a cero. |
La otra super-modalidad, que no llega a ser del todo estafa, porque sí es cierto que te pagan (solo que unos pocos centavos) es la que te ofrece hacer encuestas por Internet y revisar mails publicitarios. Muchas encuestas comienzan haciéndote un gran número de preguntas, te sacan toda la información que necesitan y casi al final te hacen una pregunta demográfica (si vives en una zona tal, o si tienes tal o más cual edad) y como no cumples con los requisitos que piden, pues ya no calificas para la encuesta, con lo que ya no ganarás dinero por ella, pero sí habrás invertido tu tiempo y le habrás brindado a estos canallas valiosa información.
Y respecto a los mails publicitarios, muchos de ellos, para acreditarte lo que deben pagarte, te exigen comprar algún tipo de producto o servicio ofrecido por los patrocinadores del sitio. Aun así, existen algunos muy serios (que sí pagan sin que inviertas un solo centavo y con los cuales puedes llegar a tener un ingreso adicional si logras que otros hagan lo mismo que tú), el problema es encontrarlos.
Anuncios Ofreciendo Trabajo.
Los encontrarás en Facebook, en periódicos locales, revistas, volantes y a veces hasta en la televisión. Muchas veces se les puede identificar o bien porque ofrecen cosas casi increíbles o porque solo ponen un número de teléfono al que debes llamar. Una vez lo haces, te dirán que la vacante ha sido ya ocupada o te tomarán tus datos para cuando esté disponible el puesto, pero lo que sí es seguro es que “aprovecharán la oportunidad para ofrecerte el producto que están vendiendo”, que es la verdadera y única razón del anuncio.
A veces lo que persiguen es ofrecerte entrar en algún tipo de Multinivel, lo cual no tendría nada de malo si no te hubiesen engañado para hacerte venir a la entrevista, pensando que ibas a encontrar una oportunidad de trabajo convencional; si no te mintieran ofreciéndote ganancias potenciales “ilimitadas” y si no te “obligaran” a comprar el paquete de capacitación, que con un costo para ellos de alrededor de un dólar, te lo enganchan a ti por $70 o $90 dólares (“claro, que tú a eso le vas a sacar muchas, pero muchas veces más…”, …según te cuentan).
En algunos casos, la entrevista persigue un solo objetivo: obtener tu Número de Seguro Social (SSN), el cual luego intentarán utilizar para robarte tu identidad, algo que está agresivamente de moda y que merece capítulo aparte. También es parte del “modus operandi” de este tipo de estafadores solicitarte información de tus tarjetas de crédito, pues, según te dicen, es “política de nuestra empresa verificar el antecedente crediticio de nuestros futuros empleados”, lo que igualmente usan para realizar compras con tus tarjetas o robarte tu identidad.
La Oficina Ficticia.
Llegarás a ellos o ellos llegarán a ti por diversas vías, pero cuando llegues hasta donde están, verás que disponen de un local no muy grande, generalmente amoblado con bastante buen gusto; habrá una Recepcionista/Secretaria muy amable, varias Oficinas vacías (“pues hay mucho trabajo y la gente está fuera trabajando”, te explicarán), pero con algunos libros, cuadernos, cuadros, fotos y otras pertenencias personales de los que no están.
Luego vendrá la Oficina de la persona que te va a entrevistar, quien generalmente es un señor o señora muy amable, con gran facilidad de palabra, generalmente de edad mediana, quien exhibirá, por supuesto, varias fotos familiares con su esposa, hijos y a veces nietos (en algunas hasta la graciosa mascota exige no quedarse fuera del tierno cuadro familiar). O sea, que no osarás imaginar siquiera que una persona así pueda engañarle en forma alguna.
Pues bien, en la mayoría de las ocasiones, solo trabajan 2 personas en ese tipo de lugares: la Secretaria y quien te está entrevistando. Los libros, papeles y cuadros de las Oficinas que viste vacías, son solo eso, “Oficinas vacías” que te hacen creer que hay mucha gente trabajando allí. Igualmente, falsos son la mayoría de los diplomas y cartas de reconocimiento que tu entrevistador te presumirá (aunque, para ser justos, estos Frankenstein del empleo falso se procuran a veces algunos documentos originales).
| Primeramente, te harán una presentación de por qué la empresa puede presumir de extraordinaria experiencia en la búsqueda de empleo, te pondrán varios ejemplos de casos de éxito que ellos llevaron a puestos ejecutivos de vital importancia y de momento… te das cuenta de que viniste por una vacante que anunciaban y ahora estás siendo motivado muy hábilmente para que hagas un pago (generalmente en ese mismo momento, pues de lo contrario “puedes perder la gran oportunidad de tu vida”) de unos $5,000 dólares, con lo cual te “garantizan” encontrarte trabajo en unos pocos meses o semanas. |
Por supuesto, dicha garantía es solo de palabra, pues si tú tuvieras tiempo y te dedicaras a estudiar el contrato que te dan a firmar (por lo regular dentro de una hermosa carpeta de piel), verás que hay una cláusula donde ellos se comprometen a “hacer el máximo esfuerzo”, pero “dado que las oportunidades de empleo dependen de tantas variables, no dan garantías de ningún tipo” (claro, te lo hemos resumido para no aburrirte, pero ya imaginarás que la palabrería jurídica lo pone de otra manera, pero con igual significado al que te estamos diciendo).
Conocemos casos de algunas empresas que rentan el lugar solo por un par de semanas a nombre de una compañía inexistente, durante las cuales llevan a cabo una “fecunda” y muy activa labor de reclutamiento para luego desaparecer, de manera que cuando regresas a tu “programada” cita dos semanas después, encuentras solo un salón vacío y el putrefacto olor de los que comercian con las esperanzas de la gente.
Y algo más. Sabemos que a lo mejor al leer estas líneas piensas que solo los tontos de remate caen en tales estafas, que a ti jamás te podría pasar eso. La fea verdad es que estos tipos son unos magos del engaño y que algunas personas muy capacitadas, brillantes e incluso “advertidas” han caído en sus garras. ¡No te confíes, a veces mientras más inteligente te crees, más fácil te atrapan!
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