La zona que elijas va a tener un extraordinario impacto en tu calidad de vida. Por ello, hay varios aspectos que deberás considerar cuando decidas comprar o rentar casa o apartamento en una zona determinada:
* La seguridad: Muchas veces, los apartamentos y casas menos caros (y a veces los únicos que están a tu alcance) están en áreas que no siempre son las más seguras. Antes de decidirte por una zona, camina o maneja por la misma, habla con los vecinos, los grupos comunitarios e incluso con la policía. Haz muchas búsquedas en Internet con esa dirección.
* La limpieza e higiene del área: con frecuencia son dos aspectos directa y proporcionalmente relacionados con la seguridad.
* La composición social del barrio: este es un punto que no se comenta en otras Guías, pero es muy importante sentirse “en ambiente”, entre “personas más o menos de similar nivel social y económico” y no tener la sensación de que estás permanentemente fuera de lugar.
Aunque legalmente nadie ni nada te puede limitar (la ley penaliza a los arrendatarios que discriminen por raza, color, creencia, etc.), si soy de piel oscura, puedo considerar no irme a vivir a un barrio donde exclusivamente residen rubios “ojiclaros”.
Igual que a casi ningún latino se le ocurre ir a vivir al China Town (Barrio Chino), a uno no le pasaría por la mente vivir en un barrio de clase alta, si aún no llega ni a la “media”. Aunque consiguiera una renta relativamente barata en esa zona, ¡imagínate un humilde “transportéichon” de 1999 –como llaman a los coches muy viejos en Estados Unidos,- al lado de los flamantes Mercedes y BMW.
O irse a vivir a un Condominio habitado fundamentalmente por personas muy mayores, que quieren sobre todo tranquilidad y no soportan a Bad Bunny, cuando debido a tus 20 años tú vas a estar siempre rodeado de amigos y amigas tan alegres y bulliciosos como tú (¡te imaginas qué problema cada vez que quieras hacer una fiesta!).
* La disponibilidad de fuentes de empleo cerca de la zona. No se trata de qué tan cerca está o no de su trabajo, pues la gente cambia con bastante frecuencia de trabajo, sino de “acercarse” a ciertas zonas desde donde te sea más cerca desplazarte a tus posibles lugares de empleo: se pierde mucha calidad de vida cuando hay que manejar 2 horas diarias de ida y vuelta del trabajo, y mucho dinero cuando se incrementa el consumo de gasolina (cuyos precios a inicios del 2025 han bajado un poco, pero no existe garantía alguna de que continúen de igual manera y, pueden encarecer tu vivienda “barata”).
* Si tienes hijos, pues será muy importante la ubicación de las escuelas. En Estados Unidos, los niños deben ir no a la escuela que más a ti o a ellos les guste, sino a la que les corresponde dada la ubicación de tu vivienda.
* Si no manejas o piensas que no vas a tener carro por el momento, entonces es muy importante la existencia de transporte público en la zona (en muchas zonas de la periferia sucede que ese transporte o bien no existe o es poco frecuente).
Es mejor comenzar la búsqueda desde tu país o que planifiques dedicarle tiempo una vez que llegues. Si vienes con tu familia, puede que sea más cómodo para ellos venir cuando ya tú hayas encontrado la vivienda adecuada.
Ten en cuenta que muchos dueños de casas y apartamentos van a querer revisar tu historial de crédito, mismo que aún no tienes, por lo que en muchas ocasiones vas a necesitar de un amigo o familiar que rente por ti o que te sirva de coaseguro. Como suponen que al no tener antecedente crediticio representas un riesgo potencial más alto, puede que te exijan un mayor depósito de seguridad u otras garantías. Pide el consejo de un especialista para determinar hasta dónde lo que te están pidiendo está dentro de lo permitido por la ley. O dentro de lo que es habitual pedir. |
Una vez que ya estés en Estados Unidos, puede ser que necesites un alojamiento temporal hasta que encuentres algo definitivo. Ten en cuenta que aquí los hoteles pueden ser bastante caros, sobre todo en las grandes ciudades, e incluso los moteles tienen tarifas que pueden afectar seriamente tu presupuesto, si no fuiste capaz de considerarlo previamente. Algunos moteles y pensiones de las afueras de las ciudades suelen ofrecer habitaciones limpias y a precios razonables, los que pueden mejorar aún más si se negocian por semanas o meses.
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